AUTISMO (TEA)
El Autismo también llamado Trastorno del Espectro Autista (TEA) es la terminología utilizada para definir a todo tipo de persona, ya sea adulto, adolescente o niño que poseen una alteración normal en el desarrollo, no solo personal y física, sino también cognitiva y neurológica. Las características comunes a las personas que poseen este tipo de trastorno son principalmente: La dificultad para la socialización e interacción con sus iguales, problemas con la comunicación verbal, corporal y escrita y comportamiento repetitivo, pero no podemos descartar la aparición de dificultades motoras, alteraciones internas, limitaciones intelectuales etc. Independientemente, existen casos de personas que poseen Autismo y poseen excelentes habilidades en campos como la música, los números, el baile etc.
El TEA suele desarrollarse en edades muy tempranas, coincidiendo con el desarrollo cognitivo de la persona, por lo que lo centráremos en edades comprendidas entre 1-2 y 3 años, siendo su evolución siempre gradual. El trastorno del Espectro Autista se considera heredable y genético, pero existen factores que en mayor o menor probabilidad pueden fomentar su aparición como por ejemplo defectos en el nacimiento.
Existen 5 tipos de TEA, conocidos como: Síndrome de Asperger, de Rett, Trastorno de desintegración infantil, Trastorno generalizado del desarrollo no especificado y Trastorno autista. Cada uno de ellos presenta unas características específicas y según estas se realiza la diferenciación dentro del Autismo.
Foto sacada de pequebebes.com
Podemos decir que para las personas que padecen este trastorno no existe cura, ningún tratamiento concreto que erradique el Autismo (aunque se conocen casos concretos de niños recuperados) pero la intervención o detección temprana puede ayudar considerablemente en competencias como el autocuidado, mejoría cognitiva, relaciones sociales y comunicación verbal y no verbal. Con todo ello queremos expresar que la independencia total de la persona con Autismo es complicada pero sí la aparición de mejoría notoria en su vida cotidiana, reduciendo algunos síntomas y aumentando con ello la calidad de vida del paciente.